logob2.jpg (2191 bytes)  Media nos donó un dBX 120muj11.jpg (1995 bytes)

-Breve historia del Loudness- 

José Mujica

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Como trabaja
El sistema sintetizador de bajos de dBX analiza constantemente la respuesta de frecuencia para hacer sus ajustes, cuidando de no saturar en las frecuencias medias, esto logra un bajo muy elegante en las frecuencias graves más extremas de la gama audible. Lo interesante del procesador de dBX es que se dedica a la región del espectro a donde siempre hemos comentado que se debe concentrar la atención, en las frecuencias más polémicas y menos conversadas entre los profesionales, las bajas.

Como siempre insisto en mis escritos y en contra de las mayorías, los cuidados de las bajas frecuencias deben tener prioridad sobre las medias y altas frecuencias. Porque en estas últimas siempre está la atención y es muy fácil hasta para un oído inexperto precisar sus fallas, el verdadero reto para un profesional, esta donde la mayoría de ellos no ataca y se descuida. Tal vez por eso los mejores son tan pocos y Sting sigue allí (Je-Je).

 

Fletcher-Munson
Las curvas de Fletcher -Munson, fueron presentadas en 1933 ante la Sociedad Acústica con el título de "Loudness, Su definición, medición y cálculo". El trabajo fue ajustado en el año 1956 por Robinson y Dadson en 1956 (Fuente, Wikipedia).

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Curvas de Fletcher_Munson


      Nunca olvidaré el comentario de un purista del sonido que le decía a otro "Yo le he quitado a muchos de mis amigos el vicio de usar el Loudness". Como es usual con mi Delay cerebral, al tiempo entendí que había de terrible en esa frase. Me dije "El uso del Control del Loudness no es un vicio sino la corrección de un defecto del oído a bajo nivel de intensidad".

     Gracias a las curvas de Fletcher y Munson desarrolladas por estos dos científicos, seguramente mientras el Dr.Fletcher trabajaba en la Grama Bell, pudimos saber con exactitud que el ser humano en niveles bajos de intensidad del sonido es poco sensible a las frecuencias bajas y altas. Es por esto que a mediados de los años 70's los equipos de Hi-Fi comienzan a traer ese interruptor que activaba el Loudness.

     El control de Loudness se intentó vender a los consumidores sin éxito. Recuerdo que en esa época ibas a las tiendas de Audio y había montañas de catálogos a full color y en muchos te intentaban explicar las bondades de este control. Aparecía la gráficas de Fletcher y Munson y te decían frases como "Si usted es de los que gustan oír música a altas horas de la noche sin molestar a sus vecinos, ahora dispone del Loudness, que le garantiza apreciar la totalidad de la gama de frecuencias audibles a bajo volumen". La mayoría de la gente no lo entendió y comparaban los aparatos con ese control como un valor agregado sin darle mucha importancia.

      Yo no fui la excepción, ya había apreciado lo que podía hacer el Loudness al sonido y quería saber más sobre él, pero al intentar entender la explicación, nada que ver, no entendí ni j.  Con el tiempo la gente también lo descubrió.  En su primera generación debías desactivar el control una vez le hubieras subido el volumen a tu equipo, porque si no pasabas a saturar bajas y altas frecuencias. Hoy tenemos toda una generación de descendientes de él más elaborados e inteligentes. Primero eran los controles automáticos que se desactivaban solos una vez el usuario sobrepasara cierto nivel de volumen.

     Después vinieron todos esos controles que ya ustedes conocen, como el Megabass, el Surround, el botón de presencia, etc. Y desde el año 95 aparecieron también para el área profesional aparatos con nombres rimbombantes como Auralizador de espectros y Excitador Aural, popularizados por las empresas Behringer y Aphex. Que no son más que unos descendientes directos del Loudnees.

No existe el sonido agradable

      Uno se pregunta si los enemigos del sonido agradable y de la calidad del buen bajo han pensado alguna vez porque existen tantos intentos, que una vez fueron aislados, en conseguir ese sonido diferente que imparte al oyente. Todavía no deja de impresionarme lo que andaba buscando Vangelis en su último concierto con 24 bombos simultáneos

dBX tenía que ir más allá

     En esta historia no podía faltar dBX, una empresa dedicada al área más abstracta de diseño electrónico pare el audio. El sintetizador de subarmónicos 120A, podríamos definirlo como un dispositivo diseñado para manejar lo que se conoce como un "Low-End Bass". EN su pa´gina dBX emplea la frase Impactar al oyente, la cual uso mucho en mis definiciones del buen bajo y mi materia favorita la Psicoacústica.

 

     Su representante en Venezuela Media c.a. nos hizo un obsequio un flamante Sintetizador de Subarmónicos 120A. Este aparato ya lo tuvimos en una época en la escuela, en calidad de prueba y quedamos fascinados. Un consejo si usted tiene un par de altavoces Control 5 en su casa, conéctele este agregado y se sentirá en los cielos. La gente de PA y las minitecas en nuestras tierras no lo han descubierto aún.

 

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